jueves, 13 de septiembre de 2012

BOMBARDEOS SELECTIVOS



     La guerra es un dinosaurio
     que no quiere enterarse de su extinción.
     La muerte, una orden de deshaucio
     que acatamos sin darnos cuenta,
     una loba que ahuyenta
     a nosotros de nosotros.

     La guerra es el fin.
     Es el fin de la guerra contra la guerra.
     Es el fin de la muerte de la muerte.
     El que quiera morir apedreado,
     que tire la primera piedra
     porque la guerra se hace contra todos,
     también contra los que no se hace la guerra.

     La victoria y la derrota son dos dolores
     de la misma herida de guerra.
     Los señores de la guerra buscan tesoros
     cavando oleoductos, fosas y trincheras.
     ¡Que la guerra se vaya en sus tanques!
     ¡Que Marte se vaya a la mierda!

     El guerrero, cuando termina la guerra,
     revive la muerte, muere la vida,
     no vuelve del todo, se sienta y ojea
     libros de historia fríos como tinta
     y se arranca las medallas de la chaqueta
     y pone dioses nuevos en la vitrina
     y el desertor es su héroe de guerra.


   

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